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Un centro de tecnología para Missoula
Los antecedentes del proyecto: La ciudad de Missoula ha conseguido fondos
de HUD (Department of Housing and Urban Development o el Departamento de
Vivienda y Desarrollo Urbano) para desarrollar la tecnología dentro de los
vecindarios de la ciudad. HUD apoya tales esfuerzos como parte
de su programa de «los redes vecinales»1. La ciudad va a distribuir
diez subsidios de $50,000. La
Universidad de Montana quiere conseguir uno de estos subsidios para dirigir
un proyecto para un vecindario local necesitado – un proyecto que se puede
implementar dentro de un año. A
continuación es una propuesta para este proyecto.
En
Missoula hay algunos lugareños que por una razón u otra no tienen acceso
suficiente a la tecnología digital.
Estas razones caen básicamente en dos categorías: el costo y el
conocimiento.
Así, por ejemplo, algunos estudiantes en
las escuelas primarias y secundarias de la ciudad vienen de familias con
recursos limitados, las que no pueden permitirse el costo de una computadora
portátil ni el costo mensual de una conexión a Internet. Estas familias viven por todo la ciudad y
no están localizadas en un vecindario restringido ni en un gran complejo de
vivienda, como ocurre en las ciudades más grandes. De hecho, la población de Missoula es sólo
67.000, que es cerca de la población de un solo vecindario en ciudades
grandes como San Francisco. (Por
ejemplo, la población del Distrito de la Misión, un vecindario de San
Francisco cerca del centro de la ciudad, es 47.000.)
También hay adultos en sus años de
trabajo a quienes también les falta el acceso a Internet y las
computadoras. Puede ser que por una
razón u otra el costo de este acceso es demasiado alto para ellos. Pueden estar desempleados o trabajando pero
viviendo en presupuestos modestos que no permiten tales «lujos». Puede también ser que jamás han tenido la
oportunidad de aprender las cosas básicas sobre el uso de esta
tecnología. Estas personas también
viven y trabajan por todo la ciudad.
En adición, algunas personas de la
tercera edad también podrían tener recursos limitados y además posiblemente
nunca han tenido el contacto con esta tecnología. Como es el caso con los dos grupos
anteriores, estas personas también viven por todo la ciudad.
Estos tres grupos de personas
necesitan las mismas cosas para ganar acceso a la tecnología digital: una
computadora, el acceso a Internet de banda ancha, la ayuda con el uso de
ambos y un lugar para hacerlo. Debido
a su distribución por todo la ciudad (la que, recuerde, es sólo el tamaño de
un solo vecindario de ciudades grandes), es esencial que el lugar esté localizado
en un edificio accesible fácilmente por el público. Tal un edificio ya existe: la Biblioteca
Mansfield de la Universidad de Montana2, 3. La biblioteca es accesible a pie, por
autobús así como por automóvil. Tiene
largas horas de operación: del lunes al viernes desde las 7 en la mañana
hasta la 1 en la mañana, el sábado desde las 9 en la mañana hasta las 7 en la
tarde, y el domingo desde las 9 en la mañana hasta la 1 en la mañana. La biblioteca tiene 85 computadoras de mesa
y 15 computadoras portátiles. Las
computadoras de mesa son conectadas por alambre a Internet y las computadoras
portátiles usan la conexión inalámbrica de la universidad. Ambos tipos de conexión son de banda ancha.
En tiempos en el pasado, el uso de
las computadoras de mesa era disponible a todo el público – estudiantes
universitarios y no estudiantes por igual.
En esos tiempos, era común ver a las personas de todas edades usando
las computadoras y el Internet. Por
supuesto, había los estudiantes de la universidad, haciendo sus tareas para
sus clases universitarias. Sin
embargo, siempre había entre ellos unos pocos usuarios de la comunidad. Algunos estudiantes de las escuelas
primarias y secundarias, muchas veces con un padre, usaban las computadoras y
el acceso a Internet para completar sus propias tareas. También, algunos adultos de todas edades
trabajaban en sus proyectos para investigar algo usando el acceso a Internet,
o escribir algo usando Microsoft Word,
o comunicar con alguien usando el correo electrónico o computar algo usando Microsoft Excel u otros paquetes. Era un sabor de la biblioteca del futuro,
en la que los recursos digitales sustituirán los recursos impresos de los
libros y las revistas. El uso de las
computadoras era ilimitado para cualquier usuario, con excepto de que los
usuarios de la comunidad eran pedidos por el personal de la biblioteca de
ceder una computadora después de un tiempo razonable en los tiempos de la
demanda alta. Además, ninguna
contraseña se requería para usar las computadoras. Sin embargo, las computadoras portátiles
eran sólo disponibles para sacar por los estudiantes universitarios.
Todo esto cambió en el verano de
2009. La administración de la
biblioteca y la universidad decidieron restringir el uso de la mayoría de las
computadoras a los estudiantes universitarios. Ahora, una contraseña disponible sólo a los
estudiantes universitarios se requiere para iniciar una sesión en esas
computadoras. La biblioteca dejó a un
lado sólo 7 computadoras en una sección aparte del resto para el uso por los
usuarios comunitarios. En esos 7, un
usuario obtiene acceso a una sesión de sólo una hora.
La razón dada por la universidad
para el cambio era algunos «conflictos» entre los estudiantes y los usuarios
comunitarios sobre el uso de las computadoras. Es probable, sin embargo, que ambos grupos
simplemente estuvieran reaccionando al número limitado de las
computadoras. Además, entre los
usuarios comunitarios parecía haber tres individuos problemáticos, quienes
causaban 80 por ciento de los conflictos, los que parecía relacionar más
entre ellos y el personal de la biblioteca que con los estudiantes. Uno de los individuos es probablemente un
esquizofrénico, y los otros dos parecen tener trastornos graves de
personalidad. De hecho, la nueva
disposición no arregló los problemas con estos tres: el esquizofrénico y uno
de los otros dos finalmente fueron prohibido de la universidad entera,
mientras el tercero había salido poco después del cambio por su cuenta. En contraste, parece que la gran mayoría de
los usuarios, ambos universitarios y comunitarios, no presentan estos tipos
de problemas y pueden fácilmente trabajar el lado al lado – como había
existido antes del cambio en la política.
El efecto de este cambio en
política ha sido bien dramático y en muchos respectos esencialmente ha
bloqueado a los usuarios comunitarios de la «biblioteca digital». Los usuarios anteriores de los estudiantes
jóvenes de las escuelas primarias y secundarias están casi totalmente
ausentes ahora. Aún entre los adultos,
no parece que ahora haya la misma diversidad de los usuarios como antes. El uso es tan restrictivo que parece que
muchos usuarios comunitarios simplemente no pueden hacer sus investigaciones
y trabajo, o lo encuentran demasiado incómodo para ser factible en la nueva
disposición. Se obtiene la impresión
que ahora sólo hay unos pocos usuarios acérrimos que rechazan dejar. Un administrador de sistemas de computadora
caracterizó a los usuarios comunitarios como «12».
También, la universidad restringe
el uso de su conexión inalámbrica de banda ancha a Internet solamente a los
estudiantes universitarios. Así, aun
si un visitante tiene su propia computadora portátil, no puede usarla porque
no puede conectarla a Internet. La
universidad ya tiene la capacidad de proveer un sistema de conexión
inalámbrica para los visitantes. El
sistema ya está en lugar para hacerlo, y a veces la universidad de hecho lo
hace – como durante las orientaciones para los estudiantes nuevos. En efecto, sólo es necesario accionar un
interruptor. No obstante, la política
es de negar el acceso en esta manera, en general. La universidad cita varias razones para
esta situación, como algunas políticas del sistema universitario de Montana,
o algunos requisitos del Departamento de Seguridad Nacional o la
«competición» con el sector privado.
Sin embargo, el hecho es que su universidad de hermana, la Universidad
Estatal de Montana en Bozeman, sí tiene acceso inalámbrico para los
visitantes. Si esa universidad puede
hacerlo, el mismo es el caso para esta universidad. Otras universidades a lo largo de Estados
Unidos también tienen este acceso – como, por ejemplo, la Universidad de
Arizona en Tucson, la Universidad de Nuevo México en Albuquerque y la
Universidad de Washington en Seattle.
Además, esta propia universidad enciende la conexión inalámbrica para
visitantes cuando le gusta. En otras
palabras, sí, es posible tener un sistema para los visitantes, y muchas
universidades lo hacen – incluso de ésta a veces.
Como una universidad estatal, la
universidad obtiene muchos fondos de los
gobiernos federal y estatal.
Por eso, tiene una obligación de hacer sus facilidades accesibles al
público. Entre el personal de la
biblioteca de la Universidad Estatal en Bozeman, hay un reconocimiento fuerte
de esta obligación. De hecho, con
excepción de los deportes como el futbol americano, probablemente no hay
ninguna manera mejor para exhibir la universidad al público que con una
biblioteca equipada con la tecnología digital moderna accesible por los
usuarios comunitarios.
Con estas cosas e historia en la
menta, se propone que el mejor uso de un subsidio de $50.000 para un proyecto
para desarrollar la tecnología dentro de los vecindarios de nuestra ciudad,
el que será dirigido por la universidad, sea la siguiente. Se propone que la universidad use el
subsidio entero para comprar y equipar algunas computadoras portátiles para
uso en la biblioteca Mansfield por los usuarios comunitarios. Para esta cifra, será posible comprar y
equipar cerca de 50 computadoras portátiles o tal vez aún un poco más. Las computadoras deberían tener estas
características:
• una pantalla
de alta densidad con «ratio de aspecto» de 16:9, el que es el tamaño de
televisión moderna en HD (alta
densidad),
• un procesador
«multinúcleo (con núcleos múltiples)» de alta velocidad,
• el sistema
operativo de Windows 7, edición
«profesional de casa»,
• la edición
profesional de Office de 2010 de
Microsoft,
• la habilidad
de conectarse con un sistema de conexión inalámbrica,
• una cámara
integral para las conversaciones con video en Skype,
• la protección
antivirus «seguridad de Internet» por Norton, y
• la protección
antirrobo Pro Premium de Computrace y LoJack.
Algunas personas podrían sugerir
el uso de la biblioteca pública en vez de Mansfield, pero para varias razones
éste no es el mejor plan. Este
proyecto es ser dirigido por la universidad.
La universidad tiene el control sobre su propio dominio, pero eso no
es el caso con la biblioteca pública.
La universidad no tendría la seguridad de que su intención vaya a
realizarse en el otro ambiente. El
personal de la biblioteca pública, como es probablemente el caso en muchas
bibliotecas, parecen estar luchando de entender en qué manera la tecnología
digital va a cambiar la función de una biblioteca en el futuro. Su punta de vista todavía podría ser más
«la biblioteca vieja» que «la biblioteca nueva». Por ejemplo, de hecho justo ha recibido un
subsidio bastante grande. ¿Qué
compró? Gastó $250.000 para un camión
para una «biblioteca ambulante» -- en vez de usar esos fondos para la
inversión en la tecnología digital. En
la biblioteca Mansfield de la universidad, se asegurará que el proyecto va a
ir como diseñado.
Para conseguir estos fondos, se
propone que sea un requisito que la universidad tenga que «accionar el
interruptor» y encender la conexión inalámbrica existente para los
visitantes, y continuar de proveer este servicio para estas 50 computadoras
portátiles, así como para cualquier otro visitante con su propia computadora
portátil.
El acceso a Internet es un tema clave en
cualquier discusión sobre la «brecha digital». Algunas personas (notablemente, los
vendedores del servicio celular) dicen que la solución es una suscripción al
servicio de banda ancha con una compañía telefónica inalámbrica, como Verizon
o AT&T. Sin embargo, este servicio todavía es muy
caro y muy limitado en la cantidad de los datos que pueden transferirse. Ciertamente no sería posible para alguien
de recursos limitados de aún considerarlo.
Además, aun si alguien puede permitirse uno, el límite de
transferencia excluye el trabajo serio.
En realidad, se necesita un sistema como él de la universidad, con
muchos usuarios, para que estadísticamente el uso promedio sea razonable. Mientras una persona está trabajando
localmente en su computadora, otra persona puede estar descargando de
Internet.
Si esto es aceptable a la
universidad, el próximo paso será comprar las 50 computadoras
portátiles. El método será contactar a
varios vendedores de las computadoras portátiles, como Hewlett-Packard, Dell,
Sony y Toshiba, con las características deseadas enumeradas arriba. La meta será conseguir el mejor performance
con el menos costo. Debido al hecho
que la universidad cualifica para las rebajas como una institución de
educación, así como a las rebajas para las unidades múltiples, será sin duda
posible comprar por lo menos 50 computadoras portátiles de alta calidad y
funcionalidad.
Entonces, las 50 nuevas
computadoras portátiles deberían ser disponibles de sacar por los usuarios
comunitarios. Este uso del subsidio
maximizará el beneficio para la gente del vecindario de Missoula. También, toma en cuenta de los recursos
existente, como el edificio de la biblioteca con sus largas horas de
operación, así como el personal entendido allí.
Un usuario debería poder de sacar
una de estas computadoras para el «uso del día» en la biblioteca. Es decir, no debería ser los límites de
tiempo como una o dos horas, como es común, sino sólo debería ser necesario
devolver la computadora antes de salir de la biblioteca ese día. Como una medida de seguridad, las
computadoras deberían equiparse con las etiquetas electrónicas que suenan una
alarma si cualquiera trata de remover una de la biblioteca.
Hay personal de la biblioteca que
puede proveer asistencia en el uso de las computadoras. Siempre hay un técnico de computadoras de
turno, quien es experto en su operación.
De hecho, la mejor manera para aprender cualquier cosa en el mundo
computacional es por medio de «entrenamiento justo en tiempo». Por eso se significa que una persona
pregunta un par de cuestiones sobre cómo hacer algo e inmediatamente trata de
hacerlo en la computadora. Entonces,
cuando su conocimiento de la computadora y sus sistemas son mejores, pregunte
un par de cuestiones más, etcétera. Si
no se opera en esta manera, es muy fácil que una persona se pierda en la
complexidad del mundo de las computadoras y el Internet. Sólo es fácil si se toma en pasos pequeños,
un paso a la vez.
Es posible – aunque no
absolutamente necesario – que podría haber algunas personas en la comunidad y
la universidad que querrían ofrecer clases en algunos aspectos de las
computadoras y el uso de Internet.
Ciertamente, esto debería ser alentado. Los cursos podrían se tratan de los temas
como el correo electrónico, los navegadores, los buscadores, Word de Microsoft y Excel de Microsoft. En general, es importante que los usuarios
entiendan cómo encontrar la información que necesitan, y cómo usar esta información
en cosas como las cartas o los informes de Word.
En esta manera, la biblioteca se
convertirá una vez más en un recurso para el vecindario que incluye ambas la
universidad y Missoula. Las personas
de todas edades beneficiarán. Los
niños de las escuelas primarias y secundarias podrán completar sus tareas con
sus padres y con la asistencia del mundo de información en la web. Las personas de edad de trabajar podrán
encontrar la información que necesitan para mejorar sus vidas, buscar un
trabajo, escribir un resumen para un trabajo, comprar algo en el mejor
precio, contactar alguien usando el correo electrónico o Skype, y mucho más. Las
personas de la tercera edad podrán hacer muchas de las mismas cosas, y tal
vez en algunos casos podrán entrar en un mundo que no han tenido la
oportunidad de explorar antes.
Hoy en día, el acceso y el
conocimiento de la tecnología digital son esenciales para cualquier
esfuerzo. El mundo de información ya
no está en libros, sino ahora está en la red.
Sin acceso a las computadoras con conexiones a Internet, este mundo
entero se niega a una persona. Por lo
tanto, es importante que las bibliotecas como Mansfield hagan este mundo tan
accesible como posible, a tantas personas como posible. El programa que ha presentarse por arriba
hará exactamente eso y pondrá en lugar un recurso de valor inmensurable, para
años, para el vecindario de Missoula.
1 HUD (Department
of Housing and Urban Development o el Departamento de Vivienda y Desarrollo
Urbano). “About the Public Housing
Neighborhood Networks (NN) Program”. Consultado en https://www.hud.gov/program_offices/public_indian_
housing/programs/ph/ross/aboutnn
2 La Universidad de
Montana. La Biblioteca de
Mansfield. Consultado el 25 de
diciembre de 2011 en http://www.lib.umt.edu/
3 Los mapas de
Google. Missoula, Montana, la Universidad de
Montana y la Biblioteca de Mansfield. Vista de
satélite. Consultado el 26 de
diciembre de 2011 en
https://goo.gl/maps/R8U83LENGaoKAUX57
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